Avatar: ¿Simple ficción o futura realidad?

Imagen del diseño de un prototipo de ‘ReWalk’

 7 de junio de 2010
Continuamos con la serie de entradas relacionadas con el plan de lectura. De nuevo reproducimos un artículos del concurso de Eurodivulgadores.

Escrito por María Lázaro-Carrasco Losana
Todo tipo de opiniones. Eso es lo que hubo cuando los que acudieron a alguna de las múltiples sesiones de esta película abandonaron sus butacas de la sala de cine con las impresionantes imágenes de los paisajes aún grabadas en sus retinas. Y es que, ¿qué sería de una superproducción sin críticas?
Sin duda, la idea está más que lograda. Está pensada hasta el último detalle, y tiene un grado de credibilidad bastante elevado. No es sólo una pura fantasía, sino que se vale de varios campos de la ciencia para hacer todo más verosímil y no dejar ninguna laguna que pueda cuestionar la coherencia de la historia que cuenta. Así, son muy apropiadas las escenas en los laboratorios, junto con los útiles que emplean y el lenguaje que utilizan.

 
Neytiri y Jake de la película Avatar.
Además no todo es ficción. La empresa israelita ARGO Medical Technologies ha desarrollado un exoesqueleto para personas con parálisis en las piernas llamado ReWalk. Se trata de un esqueleto electrónico exterior que mueve las piernas y  hace avanzar a quien lo lleva. ReWalk ayuda a las personas paralizadas de la cintura para abajo a levantarse, caminar y hasta subir escaleras. El sistema, que requiere muletas para ayudar en el movimiento, consiste en soportes motorizados para las piernas, sensores en el cuerpo y una mochila con una caja de control computarizado y baterías recargables. El usuario elige un modo con un control remoto colocado en la muñeca -pararse, sentarse, caminar, descender o subir- y luego se inclina hacia adelante, activando los sensores del cuerpo y poniendo en marcha las piernas robóticas.  Puede que no sea uno de los mayores logros necesarios para que lo que nos cuenta la película se pueda realizar, pero gracias a él podemos tener prácticamente asegurado, en un futuro próximo, el funcionamiento de los robots motorizados dirigidos con nuestro propio movimiento.

El argumento nos lleva a una época futura, en la que se suponen varios avances científicos y tecnológicos: el poder sobrevivir en otro planeta distinto al nuestro, en este caso, el planeta Pandora, y además ocupar el cuerpo de otra especie, manteniendo mente y personalidad. En cuanto a Pandora, es un planeta que está vivo. Sus pobladores tienen una conexión especial con él, establecida mediante el árbol de la vida. Así cuando matan a un animal (aun siendo en defensa propia) hacen después una oración para pedir perdón por lo que han hecho. Esto nos lleva a formularnos una pregunta: ¿es posible que un planeta así pueda existir? No tenemos indicios de ello, pero sólo hemos explorado una ínfima parte del universo…
Tal vez vivir en otro planeta no sea totalmente inalcanzable a medio plazo. Pero… ¿habitar el cuerpo de otra especie, diseñado a tu medida? Eso es lo verdaderamente impresionante, tal vez lo que a nuestros ojos y mentes parece menos factible. Por qué no decir imposible.
Planteándolo desde otro punto de vista, la situación se presenta más esperanzadora. Debemos tener en cuenta un factor muy importante: el año en el se producen estas innovaciones. De esta fecha dependerá que esto se pueda realizar o no.
Para entonces los avances y los conocimientos en campos de la Bioquímica y la Tecnología serán más amplios y notorios. Contando con esto, y con la nueva generación de jóvenes que a día de hoy se preparan en Universidades de todo el mundo para ser futuros biólogos, ingenieros, científicos… podríamos casi afirmar que lo que nos plantea esta película no es simple ficción, sino una futura realidad, tal vez no tan lejana.
María Lázaro-Carrasco Losana es alumna de 4º de ESO del Colegio Franciscano de la Inmaculada (Toledo).
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via: http://eurekadivulgadores.wordpress.com/bases-del-concurso/

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