La electricidad es un fenómeno muy habitual, muchas de nuestras actividades cotidianas se relacionan con ellas: la iluminación que utilizamos, el calor de nuestras estufas, la televisión... En la entrada vamos a abordar la electricidad de una forma algo más científica
La electricidad es un conjunto de fenómenos físicos en los que desempeña un papel fundamental la carga eléctrica. Hay dos tipos de cargas eléctricas, una positiva y otra negativa. Ambos tipos de cargas se localizan en los átomos que forma la materia, de forma más concreta en los protones y los electrones.
Para conseguir que un cuerpo se electrice podemos utilizar diversos procedimientos, quizás los más importantes son:
1.- Mediante el frotamiento.
2.- Mediante la Inducción electromagnética.
3.- Mediante la Inducción electrostática.
Aunque te parezca increíble frotando dos cuerpos podemos modificar la distribución de cargas y con ello generar electricidad, la electricidad consiste en el movimiento de electrones o de otras partículas con carga.
Para poder sacar algún provecho a la electricidad además de generar cargas eléctricas debemos de ponerlas en movimiento. Una forma de hacerlo es generando un desequilibrio. Una vez produciendo el desequilibrio, como las cargas del mismo signo se repelen y la de signo contrario se atraen, se pondrán en movimiento, generándose un movimiento, una corriente eléctrica, que, como ya hemos dicho, es lo que a nosotros nos interesa realmente.
Pero claro, debemos de hacer algo más, pues si bien el movimiento inicial de cargas se produce a causa del desequilibrio de cargas, si no lo remediamos pronto el desequilibrio desaparecerá. Por el contrario, si somos capaces de mantener ese desequilibrio de forma constante tenderemos asegurada la existencia de una corriente eléctrica de forma permanente, que repito, es lo que a nosotros nos interesa.
¿Cómo conseguir un desequilibrio de forma permanente?. Aunque no es asuntos del artículo, ya lo trataremos, para facilitar la comprensión podemos decir que en las pilas el desequilibrio se consigue mediante una reacción química.
Te preguntarás que ganamos cuando conseguimos una corriente eléctrica, pues veras, cuando las cargas eléctricas están en movimiento los electrones se golpearán con todo lo que encuentran a su paso, haciendo que los átomos del cuerpo vibren a mayor velocidad lo que provocará que el material se caliente.
Este efecto que estamos describiendo se denomina efecto Joule y tiene infinidad de usos, todos basados en lo mismo: en convertir el movimiento de los electrones, a través de los choques con los átomos, en energía de tipo calorífica.
Aquí tenéis algunas imágenes impactantes relacionadas con el efecto Joule.
Fotografía por Daquella manera en Flickr
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